Sueños y realidades

Hace días que no escribo porque el tiempo está demasiado repleto de quehaceres y me queda poco tiempo para compartir con vosotros mis vivencias pero hoy después de unos días de desconexión, de los que aún no me he desprendido del todo por tanto como me han concedido, me asomo de nuevo por aquí... y lo hago para daros señales de vida pero también en un vano intento de ordenar mis emociones y centrarme en aquello que debo volver a asumir.

A veces pienso que debería tener la capacidad de olvidarme de tanta obligación, ser de aquellas personas capaces de eludir responsabilidades y pasar de la conciencia que tengo demasiado bien implantada pero la realidad es otra y por eso en demasiadas ocasiones me sobrecargo tratando de llegar a todo y pospongo mis deseos en post de mis obligaciones.

Sé que suena un poco mal así expresado pero estoy convencida de que todo llega a su debido tiempo y que mis sueños actuales son el motor que me impulsa y me da aliento. Siempre deberíamos tener sueños y la paciencia necesaria para llegar hasta ellos y volver de nuevo con nuevos alicientes mientras disfrutamos de los ya conseguidos.

Miro hacia atrás y me siento orgullosa de las nimiedades conseguidas, de las luchas superadas y las ilusiones mantenidas a pesar de que todo se empeñaba en mostrarme lo contrario...y así continuo con esas ilusiones que me mantienen la mirada despierta y consiguen alejarme cuando las turbulencias lo nublan todo.

Nadie dijo que sería fácil, ¿verdad?